Hay un ogro en mi

Hay un ogro en mi. He sido poseída por un ogro... O quién sabe, a lo mejor formo parte de ese grupo y tengo cuerpo de persona y alma de ogro... No sé, no sé cómo es posible, pero hay un ogro en mi (como la canción, 'Hay un amigo en mi..." pero con ogro...). Yo lo conozco. ES muy caprichoso y sale cuando menos me lo espero, y es impaciente, cuando quiere salir tiene que hacerlo... Yo no lo controlo, me controla él a mi... y eso es lo peor porque claro, me pilla desprevenida (a mi y a quien padezca la furia)... Y es que es eso, siempre hay alguien afectado. No hay distinción, es cualquiera, porque el ogro no quiere hacer daño nadie, sólo quiere salir, quiere dejarse ver...
Me gustaría poder hacerle ver que no debe actuar contra las personas, que si necesita descargarse es mejor que lo haga conmigo, que no involucre a nadie más, que mejor que yo no lo conoce nadie... Pero no, a él le gusta salir cuando hay alguien más, le gusta hacerse notar, que la gente sepa que existe...
No me gusta nada tener un ogro dentro de mi... Quiero creer que todos tenemos uno dentro, que está tranquilo, y que el problema viene cuando quiere tomar cierto protagonismo en nuestras vidas.
Me ha costado aceptarlo pero lo he hecho, ahora sólo me queda aprender a vivir con él.

"Los ogros son criaturas antropomórficas cuyo tamaño y fuerza son mayores a los de un hombre normal. Aparecen en varias culturas y todas ellas coinciden en que se alimentan de hombres. Algunas de las culturas que los mencionan son la Nipona, la Nórdica y los Indios Americanos."
"Los ogros fueron los primeros seres creados y dados a la vida en Krynn. En sus principios eran de una belleza extrema, muy superior a los elfos, y poseedores de una magia innata. Sin embargo, el mal que en ellos anidaba corrompió primero sus almas y luegos sus cuerpos, transformándolos en lo que ahora son. Sin embargo, un grupo de ogros se salvaron de su auto-destrucción, pidiendo amparo a los dioses benignos. Mishakal les dotó del poder de transformarse en humanoides para huir de la mano de su madre Takhisis. Tal pueblo se les conoce como los irda, los últimos vestigios de la raza más antigua de Krynn.
Poco se conoce de esta raza, salvo la curiosa forma de procrearse, según el cuento "La hija de Raistlin" (Historias de Ansalon) y posteriores informaciones en Los Caballeros de Takhisis. Entre ellos se da el Valin, una especie de atracción sexual que sirve para perpetuar la especie. Es por ello que no podría decirse que los ogros sientan amor por alguna criatura."