Al final se me pasaron las ganas de vomitar. Tardé un poquito, incluso ya en la cama aún las sentía, pero se pasaron si darme cuenta. O no sé, a lo mejor es que me dormí y no me di cuenta o algo. Tardé un montón en dormirme, eso sí, porque es que me entró como un miedo así raro... como si hubiera espíritus en mi habitación que me dijeran cosas. Ais, si es que últimamente no sé qué es lo que me pasa pero no soy la que era a la hora de dormir. Estoy volviendo a mis épocas de insomnio horrible. Y ahora no hay excusa porque no se puede decir que no esté cansada...

Pues no sé, que el caso es que se me pasaron las ganas de vomitar en la cama, sin darme cuenta, y esta mañana ya no las tengo.

Ya supongo que estaréis pensando que esto os importa bastante poco, pero como ya he dicho otras veces, es mi blog y escribo lo que me da la gana.